miércoles, 26 de diciembre de 2007

martes, 25 de diciembre de 2007

Tenores enjaulados



La Asociación de Canaricultores Nuevo Gijón entrega los premios del concurso de canto en el que 224 aves desplegaron su mejor repertorioen los locales de la Agrupación Vecinal Evaristo Valle de Tremañes
24.12.07 -

En el concurso, celebrado hace unos días en la Agrupación Vecinal Evaristo Valle de Tremañes, los tenores no estaban subidos a un escenario. No cantaron frente a un micrófono ni los acompañó una orquesta. Eran canarios amaestrados para lograr desplegar su mejor repertorio durante 15 minutos frente a un juez. En el certamen participaron una treintena de criadores de toda Asturias con 224 aves anilladas este año, es decir nóveles, de la raza 'timbrado español'.

Los canarios de canto interpretan verdaderas partituras y emiten sonidos de una complejidad sorprendente para sus pequeñas gargantas. Compiten de manera individual o en grupos de cuatro. Cada pájaro metido en una pequeña jaula pasa por lo ojos del juez, en este caso Leopoldo Tamargo, que va otorgando la puntuación en diferentes apartados: «agua lenta, semiligada, floreos, cascabel, timbre de agua», entre otras. También hay aspectos que restan como «la rascada, las estridencias o la nasalidad» del ave.

Defender el terreno

Según explicó ayer Florentino Fernández, presidente de la asociación de canaricultura Nuevo Gijón organizadora del concurso, «los pájaros reproducen el sonido de la naturaleza y cantan para defender su terreno. También trinan cuando les excitar la luz. Además, lograr un canario ganador es fruto de mucho trabajo hasta conseguir una buena línea familiar usando las leyes genéticas».

Fernández, junto a Enrique Cerra, presidente de Evaristo Valle y Ernesto Murias, presidente regional, entregaron los premios a los ganadores de las distintas modalidades del concurso, que es puntuable a nivel regional. Al acto también asistieron los representantes de las asociaciones de canaricultores de Gijón, Oviedo, Avilés y La Felguera.

Es un pena que la Asociación de Vecinos de Tremañes, no se haya acordado de los viejos Canaricultores vivos o muertos de su propia parroquia, y les hubiera dedicado un merecido homenaje.

Desde bien crio recuerdo viajando camino de Gijón, con jaulas de canarios en la mano, en aquellos tiempos que no había coche privado, y allá nos íbamos a los concursos, de la mano de padre, orgulloso como estaba de sus canarios, los cuales nos llenaban la casa de copas, que luego los veranos teníamos que limpiar una a una para desgracia de nuestros juegos.

O aquellos Domingos donde el personal aparecía por casa para cambiar canarios, o emparejarlos tal como hacía Chelu, o el propio Pipo.

Algún día contaré alguna que otra anécdota de canarios

lunes, 24 de diciembre de 2007

PROTESTA EN LA QUINTANA


Lo que hasta hace años, fue un eje de comunicación tranquilo, se ha ido convirtiendo con el paso de los años, en una importante vía de comunicación entre dos zonas como son la de Pumarin y La Calzada, sin olvidar la atracción de flujos circulatorios que ya absorve el propio Tremañes con sus poligonos industriales. He aquí la protesta vecinal.

Hasta ahora no hemos tenido que lamentar daños personales, pero un día pasará una desgracia». Los vecinos de Tremañes están preocupados por «la peligrosidad» del camino de La Quintana. Esta «estrecha» vía comunica la iglesia de la parroquia con la avenida del Transporte y según asegura la asociación vecinal Evaristo Valle, «el camino recibe numeroso tráfico y no sólo turismos, sino también camiones y por su anchura resulta difícil el cruce de dos vehículos y muy peligroso el paso de los viandantes».




Los vecinos aseguran que «en este camino ya ha habido varios accidentes de tráfico porque existe un puente levadizo, por el que transitaba el tren de La Camocha, que obstaculiza el tráfico e impide la visibilidad». Además, señalan que esta zona «carece de una acera o de un simple carril peatonal».




La entidad comenta que «por fortuna, el último accidente tan sólo provocó el derribo de un poste telefónico y daños en la carrocería del vehículo siniestrado», pero alertan que este incidente «se trata de un aviso más».La agrupación vecinal ya comunicó al Ayuntamiento esta situación, que ellos califican como «lamentable». Además, en el escrito enviado al Consistorio los vecinos reclamaron la instalación de un espejo retrovisor frente a la entrada de la iglesia, donde según la entidad «ya chocaron varios coches por falta de visibilidad».




Esta es ya una «vieja demanda», ya que la agrupación vecinal tienen constancia de que en el año 2004 la entidad envió al Consistorio otro escrito en el que se explicaba la «grave situación» de esta vía tanto para el tráfico como para los peatones. Además, los vecinos de Tremañes cortaron la carretera como protesta el pasado 12 de diciembre.




Por otro lado, la entidad pide la poda de una enredadera que trepa por la pared de una finca abandonada. El problema es que el ramaje oculta uno de los semáforos de la avenida de Los Campones, colindante con la calle de Santa Cecilia