domingo, 29 de marzo de 2009

Los vecinos de Tremañes denuncian el derribo del lavadero de Lloreda

 

 

La Asociación de Bareza informa a la Guardia Civil por considerar que se trata de un elemento protegido.

Restos del lavadero de Lloreda, tras ser derribado. ángel gonzález

Alejandro ÁLVAREZ
Nuevo golpe al patrimonio etnográfico del concejo. Las obras de urbanización del polígono de Lloreda, que se están desarrollando en Tremañes, se han llevado por delante el lavadero del barrio, que ayer quedó reducido a escombros. La Asociación de Vecinos de Bareza ha denunciado los hechos ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, al tratarse, según aseguran, de un elemento protegido incluido en el nuevo catálogo urbanístico de Gijón, aprobado hace un año.


Los vecinos aún no tienen claro quién es el verdadero culpable del «atropello», si el Ayuntamiento o la Sociedad Mixta de Gestión y Promoción del Suelo (Sogepsa), máxima responsable, al menos sobre el papel, del desarrollo del polígono. En el lugar que hasta ayer ocupaba la construcción se prevé un nuevo vial, a pesar de que, según denuncian los vecinos, el PGOU califica toda la zona como de protección, incluido el bebedero destruido.


Esta desaparición se suma a la de al menos ocho hórreos y paneras en la parroquia de San Andrés de los Tacones a causa de las obras de desarrollo de la Zona Logística e Industrial (ZALIA), el pasado mes de febrero. Aquel episodio originó una gran polvareda que puso de relieve la debilidad de la protección del extenso patrimonio etnográfico del concejo, que suma cerca de 2.600 construcciones, según recoge el catálogo urbanístico municipal.


Precisamente en los terrenos de Lloreda donde se está urbanizando el polígono existen tres hórreos, cuyo futuro, según los vecinos, estuvo también amenazado. Aunque aquí, a diferencia del lavadero, Sogepsa se curó en salud e inició su traslado según lo dispuesto en la normativa para evitar reavivar la polémica surgida en San Andrés de los Tacones.

NOTA: Lo cierto es que el patrimonio de la parroquia, no sé si está  o estaba inventariado, pero lo poco que pudiéramos haber tenido, lo cierto que se ido bien por la falta de sensibilidad de os vecinos y propietarios o bien por la acción de la terrible piqueta, que en esta parroquia ha sido escandalosa. Yo creo que no hay parroquia o aldea que haya tenido más acciones de expropiación que Tremañes, que ha sido el principal motor de la diáspora vecinal, hoy tenemos otros residentes, y esperemos que otras aptitudes

Víctor Guerra