domingo, 23 de agosto de 2009

El derribo de la panera de Tremañes

Ahora le ha tocado el turno a a una panera, pero el poco patrimonio que tenía la aldea de ha volatizado, ahora es el PP el que coge por el cuello a los socialistas, pero los gobiernos de la derecha en sus buenos tiempos hicieron lo mismo, así se volatizaron las “Quintas” o el emplazamiento de la Fuente del Mortero, o lo lavaderos , o las fuentes publicas…. etc…

NO es nada nuevo bajo el sol, lo que está sucediendo, pero fuera como fuere, nos quedamos sin un rastro más de nuestra historia

El Gobierno avaló  por su mal estado

El PP propone crear un premio por conservar el patrimonio y critica a Cultura y al Ayuntamiento

El Gobierno avaló el derribo de la panera de Tremañes por su mal estado

Derribo de la polémica panera. / LUIS SEVILLA

El Gobierno regional autorizó el derribo de una panera de Tremañes y procedió a su «desafectación», ya en la pasada primavera, porque sufría «alteraciones irrecuperables» que eliminaron su interés etnográfico, según dijo ayer a EL COMERCIO José Luis Vega, director general de Patrimonio Cultural del Principado.

Vega indicó que, previamente y por las mismas causas, el Ayuntamiento de Gijón procedió a descatalogar la construcción. También explicó que una decisión de ese tipo nunca es tomada por una sola persona, sino que fue el Consejo del Patrimonio, a la vista de los informes técnicos, el organismo que autorizó el derribo.

En similar sentido, el concejal gijonés responsable de la Zona Rural, Faustino García, detalló que la panera causante de la polémica había sido cerrada por abajo y albergaba un servicio y otros elementos que nada tienen que ver con las construcciones tradicionales de ese tipo.

García indicó que los hórreos están ahora sometidos a un control más riguroso para evitar que acaben convertidos en fines de semana sin valor etnográfico alguno, de forma que sólo se autoriza su instalación en determinadas circunstancias y vinculados a una vivienda legalmente construida. Pero, según el citado concejal, no siempre fue así, y hace años era frecuente alterar la estructura de las construcciones tradicionales conforme al gusto y la conveniencia de sus propietarios.

Oposición

El Partido Popular no se mostró ayer complaciente con la decisión tomada y, antes bien, censuró la gestión del patrimonio etnográfico de Principado y Ayuntamiento por consentir que se produzcan las alteraciones que los dañan.

En ese sentido, el concejal Manuel Pecharromán anunció que propondrá a los grupos municipales la instauración de un premio, que podría tener dotación económica, dedicado a distinguir a las personas que mejor conserven el patrimonio etnográfico del que sean propietarias.